viernes, 21 de agosto de 2009

Bipolaridad


Como moscas los sonidos se avecinan hacia mí
Como moscas en mis oídos forman danzas sin respeto
Es posible vivir en dos lados en el mismo cuerpo.
Mi rostro deforme debajo de la escalera de arena miraba perdido a la mujer de dali.
Gala venia hacia mi, perdida, delgada, muerta, sin ganas.
¡Sin contenido!
¡Sin contenido!
Siento el frío en mis venas
Recuerdos azules mientras la picazón carcome mi cuerpo
Perdido, estúpido, drogado me siento, pero no se si siento a veces
A veces me pierdo pero estoy con ellos, con ellos que juran que estoy cuerdo, con ellos que me miran y viven por mí sin saber que yo no por ellos.
Espero a que el cáncer me consuma, así como los cigarrillos que consumo
Y espero en una sala de párvulo, sentado entre las paredes blancas, sin infantes a mí alrededor, quizás sin nada que esperar de mis memorias, quizás sin nada que esperar de mis padres, o de mi mismo. Y así es como las paredes se disolvían como lagrimas en mi rostro daban paso la nieve, con sus paisajes tan pulcros y tan envolventes, pero tan silenciosamente ingratos.
Recostado en la nieve mis lagrimas moradas se aproximan a la superficie a invadir mi sonrojado rostro mientras los arboles tocan los violines para motivarme mas a llorar y sentirme desdichado.
Quisiera vomitar y tropezarme en el baño y gritar en llantos por no saber que es lo que me ocurre.
Señores! Que es lo que nos ocurre! Que mierda es lo que nos pasa. Es como una plaga esta enfermedad que nos consume, que nos aburre… que me distorsiona.