domingo, 20 de julio de 2014
Naturaleza muerta
polvo humeante milagroso
mezclado de arena de sílabas y nombres
donde el alfabeto desova una oscura necesidad
En ese momento
en la mas profunda soledad
Absorto en el más oscuro de los silencios
una navaja dorada abrió mi pecho
A pulso ciego removí los costillas
Para sacar los frutos podridos
que coronan la distancia y la costumbre
Una a una
De par en par las he juntado
Manzana pera
Han empapado mi lecho
Cascaras de Naranja y arándanos
Coronan mi cabeza
Fragancia en descomposición
En estela de rito exsorsisante
Mi cuerpo es un presente siempre incompleto
La esperanza es la lengua podrida de lo aceptable
Su sabor amargo se estanca en mi garganta
Negro néctar tiñe las sabanas
En una fiesta fúnebre
Entre frutas y costillas
solo puedo mirar hacia el cielo
en ese tiempo sin horizonte
Convocando entre saliva y dientes
que me traerá la voluntad de dormir
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario